El Knightscope K7 es un robot de seguridad de cuatro ruedas totalmente autónomo que pesa 350 kg.
Está diseñado para aplicaciones multi-terreno y es más práctico para su uso en aeropuertos, prisiones, subestaciones eléctricas y parques solares/eólicos.
Este robot cuenta con una dirección holonómica, lo que significa que puede moverse como un “cangrejo” que gira o se mueve de lado a lado.
Utiliza LiDAR, sonar, GPS, imágenes térmicas, reconocimiento de matrículas y detección de personas.