Los mapas de actividad neuronal presentan con frecuencia una imagen incompleta de cómo funciona un cerebro; se puede medir la actividad eléctrica, estimularlo o visualizar la anatomía, pero no puede hacer las tres cosas. Ahora mediante un nuevo tipo de sensor lo han logrado.
DARPA y la Universidad de Wisconsin han construido un sensor cerebral híbrido que combina técnicas eléctricas y ópticas para presentar una imagen vívida de lo que está sucediendo dentro de la mente.
El sensor utiliza grafeno ultra-delgado (sólo cuatro átomos de espesor) que conduce la electricidad y deja pasar la luz.
Al poner este dispositivo en la parte superior del tejido neural, puede crear simultáneamente actividad cerebral y supervisar prácticamente todos los aspectos de la misma.
El grafeno es seguro para el cuerpo, por lo que no debe hacer frente a los mismos riesgos que se ven con aleaciones de metales.
Todavía es pronto para el proyecto, por lo que no va a obtener los implantes basados en grafeno en un futuro próximo.
Sin embargo, una versión final podría hacer maravillas para la medicina.
Los médicos y los científicos podrían ver correlaciones estrechas entre la actividad en ciertas partes del cerebro y el comportamiento relacionado, lo que podrían ayudar a estudiar y tratar enfermedades que antes eran un misterio.
Fuente: Engadget