En un artículo que aún no ha sido revisado por pares, físicos dirigidos por el físico teórico de la Universidad de Wisconsin-Madison, Yang Bai, declararon que nuestro modo actual de detección de exoplanetas puede ayudar en el futuro a los astrónomos terrestres a detectar mundos enteros hechos de la sustancia misteriosa.
Los científicos se refieren como materia oscura.
La forma en que actualmente detectamos exoplanetas, señala el artículo, implica observar cómo el planeta afecta la luz de su estrella anfitriona, porque cuando esos planetas pasan frente a nuestros telescopios, atenúan la luz de sus estrellas ligeramente.
Usando esta misma metodología, el equipo de científicos postula que si los telescopios detectan alguna interrupción en la luz de una estrella que no parece seguir las reglas de los exoplanetas regulares, podrían resultar muy exóticos, lo que los investigadores llaman “exoplanetas oscuros“, hechos enteramente de materia oscura.
La materia oscura es un material teórico cuya existencia solo podemos inferir mediante la observación de sus efectos en otras cosas, porque no podemos verla ni detectarla como lo hacemos con la materia típica o bariónica.
Básicamente, la existencia de grandes cantidades de materia oscura podría explicar por qué las observaciones del universo no muestran que se comporte como debería.
Algo tiene que explicar esa discrepancia de materia, y la teoría predominante es la materia oscura.
Si bien la materia oscura generalmente se analiza en el contexto de partículas individuales, esta investigación se enfoca en otra forma: estructuras compuestas de materia oscura que podrían existir en un nivel “macroscópico”.
Según sus cálculos, estas estructuras podrían tener masas tan grandes como los planetas.
“Un estado macroscópico de materia oscura con su masa y/o radio similar a los de un planeta se comportará como un exoplaneta oscuro si está limitado a un sistema estelar“, señalaron los escritores del artículo, “incluso si la física subyacente del objeto se parece a otra cosa”.
Quizás lo más importante de este tipo de teoría, que, debemos recordar, aún no ha superado los rigores de la revisión por pares, es que depende de una sustancia que no se puede ver ni medir de forma normal. Hay algunos científicos, de hecho, que no creen en absoluto en su existencia.
Hasta el momento, no hace falta decir que no se han detectado “exoplanetas oscuros”, pero esta emocionante teoría sugiere que puede haber una manera bastante simple de encontrarlos, si los científicos están dispuestos a buscar.
Fuente: arXiv